Te extraño.
Sabia bien en ese momento que me estaba despidiendo de vos, que iba hacer el último abrazo, el último adiós. Mi conciencia estaba preparada para que te vayas, pero mi corazón no. El dolor es inevitable, no se puede esquivar, hay que a prender a vivir con el. Pasaron ya muchos meses, y te extraño igual que aquel día que nos despedimos. Quiero saber como aprender a vivir sin vos, sin tus abrazos, sin tus risas y sin tus enseñanzas. Quiero que me retes por andar descalza, quiero que me digas "abrígate nena que te vas a enfermar". Quiero y necesito que me cuides donde seas que estés, sosteniéndome para no caerme. Quiero escuchar tus te quiero otra vez. Te recuerdo todos los días, con esa sonrisa increíble que tenias y esa felicidad que ni los momentos malos te sacaban. Fuiste la persona que más me enseño a como vivir la vida, sos mi ejemplo y quiero que lo sepas, por más que nunca te lo pude decir, me enseñaste todo. Que nunca se pierden las esperanzas, hasta el últi